¿Saben que es raro?
Cuando uno obtiene lo que quiere, sin darse cuenta.
En múltiples entradas de blog, estados de Facebook y en la vida real a través de los años, me he quejado amarga y furiosamente del incesante bombardeo de temas navideños meses antes de diciembre.
Y sé también que es algo personal, aunque mucha gente comparte mi opinión (en especial aquellos a los que NO les gusta la Navidad), es poco factible que deje de suceder, ya que hay muchos intereses detrás de esta práctica.
Y está bien, la gente tiene derecho a ganarse la vida como mejor les parezca, mientras sea de forma honesta.
No es realista pensar que el mundo se va a acomodar a mis gustos, necesidades e ideas, solo los cretinos egoístas piensan así.
Y eso no es muy Navideño que digamos.
A decir verdad, tampoco funciona el resto del año, pero ¿Qué le vamos a hacer?
Por ejemplo, creo que Waldo’s tiene adornos y artículos navideños en exhibición desde antes de septiembre. Podría estar exagerando, pero por lo menos se que están desde mediados de septiembre, junto con las cosas del día de la independencia, hechas en China.
Es molesto, lo sé, los centros comerciales han de tener las decoraciones listas antes de noviembre, se comprende porque son negocios, y es la época del año en que gastamos más dinero.
¿Me voy a poner a predicar sobre la espiritualidad y la magia de la Navidad? ¿Sobre lo importante y maravilloso que es la espera en sí? No creo, desperdicio energía y en verdad no logro nada, ¿Qué es lo que haría Jesús?
Esperando a celebrar Hannukah, supongo.
La Navidad significa diferentes cosas para diferentes personas, MI forma de vivirla y celebrarla difiere de las personas que están allá afuera y viceversa, puedo vivir con eso fácilmente.
PERO (y así, con mayúsculas…)
Como decirlo… ¿me aventuraría a pregonar un “Milagro de Navidad”?
Creo que sería demasiado, pero sin un plan, sin un precedente, por lo menos en TV, no me siento bombardeado con información navideña, y además, la gente no ha comenzado a llenar sus casas de adornos.
Estoy escribiendo esto el 27 de Noviembre.
En años anteriores, para esta fecha o antes, estaríamos hundidos en renos, santa closes y arbolitos pregonando las ofertas navideñas, los descuentos de fin de año y la felicidad que causa comprar a seis meses sin intereses con tarjetas de crédito participantes.
Este año, no es así…
Raro… ¿No?
Aunque, no mas raro que esta foto...¿Que onda...?
Y me siento como que me falta algo, como que andar refunfuñando por esa situación es parte de mi muy personal experiencia decembrina.
Pero en verdad, no me molesta.
Así que por eso decía, cuidado con lo que pides, porque se puede hacer realidad.
¿Sera a caso el advenimiento de una nueva mentalidad con respecto a esta fiesta?
¿Se respetara la maravillosa anticipación que hace esta breve y fantástica celebración de fin de año?
Si, como ño
Y si las ranas tuvieran alas, no arrastrarían el culo.
No sé por qué sucedió esto, pero me agrada…culpemos a la crisis económica mundial, a las Profecías Mayas o a la lluvia/Luna/playa…y no es mucho, pero bueno…algo es algo.
Ya veremos si hay uno que otro milagrito en miniatura que pueda hacer que la Navidad brille un poco más.
Nos leemos.
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